La crítica de la semana. ‘Vengadores. Endgame’: ¡gracias, Marvel!
Los devastadores acontecimientos que puso en marcha Thanos destruyeron la mitad del universo y fracturaron las filas de los Vengadores, utilizando el poder de las seis Gemas del Infinito. Ahora, los Vengadores que quedan deberán encontrar la determinación suficiente para levantarse y lograr derrotar a Thanos de una vez por todas.
Qué difícil es decir adiós. Qué difícil es contemplar el final de una era que tan buenos momentos nos ha dado.
A lo largo de la historia del Cine, solo unas pocas sagas han perdurado con tanta fuerza como para trascender el paso del tiempo, marcando a las generaciones que las vieron nacer y sirviendo de inspiración (e imitación) a sus competidores : ‘Star Wars’, ‘Star Trek’, ‘El Señor de los Anillos’, ‘Harry Potter’ y, desde el explosivo y fresco ‘Iron Man’, el MCU de Marvel.
Lo que Stan Lee y Kevin Feige (mayormente) han creado, no solo es una mastodóntica máquina de ganar dinero (que se lo digan a los avispados inversores de Disney, su actual propietaria), sino un complejo, intenso, vibrante, emotivo y divertido Universo, repleto de personajes carismáticos que han sobrepasado las viñetas para convertirse en iconos de la cultura popular, para lectores (y no lectores) de cómics.
‘Vengadores: Endgame’ cierra un ciclo con once años de historia, y abre otro de incierto pero prometedor destino.
La película de los hermanos Russo (que, recordemos, han filmado las cuatro mejores películas de Marvel y, probablemente, del fantástico/cf de la última década) es una epopeya de 3 horas que pasan en un suspiro, mientras navegamos con nuestros héroes a través del tiempo, repasando esta gloriosa era en su intento por arreglar el demoledor chasquido de Thanos.
‘Infinity War’ nos mostró cómo se lidia con el fracaso.
‘Endgame’ se centra en las terribles consecuencias de la pérdida.
Para la humanidad y, también, para nuestros héroes, que tuvieron la victoria en la palma de la mano, y aún así perdieron.
El elenco original (Iron Man, Thor, Capitán América, Viuda Negra, Ojo de Halcón y Hulk) ha sido azotado sin piedad por los acontecimientos. Poco les queda ya, salvo las ganas de luchar para recuperar a sus seres queridos.
Cueste lo que cueste, no cejarán en su empeño de detener al Titán (aquí un poco más loco), ayudados por el resto de superhéroes que se han ido incorporando al Universo Marvelita, hasta el increíble encuentro final, que marca la última hora de la película.
En ‘Endgame’, los Russo se las arreglan para compaginar la acción a raudales, el humor macarra (atentos a Thor y su bendita presencia), los inagotables guiños, el fan service y la melé cósmica , con una historia íntima y profundamente humana, donde conectaremos una y otra vez con los sentimientos y dilemas de diversa índole que, inevitablemente, acompañan a Tony y el resto de Vengadores.
Estamos ante la película más emotiva del MCU, a la altura de la sobrecarga emocional que nos supuso, en su momento, la magnífica ‘El retorno del Rey’.
También, ‘Endgame’ supone la definitiva carta de amor y homenaje al público y los personajes que hemos conocido (y querido) durante estos años en la gran pantalla; a la propia Marvel y su Universo compartido y, cómo no, la promesa de un futuro cinematográfico donde las cosas cambiarán, y se renovarán, pero manteniendo (esperemos) el rumbo fijado por las capaces manos del tristemente fallecido Stan Lee y el incombustible Kevin Feige.
Para terminar, recalcar que los fans, independientemente del héroe que tengan como favorito, se verán recompensados en este juego final: todos tienen su momento para lucirse y hacerse valer, sobre todo durante el acto de clausura.
El futuro dictará si estos 10 años largos del MCU fueron los mejores, o aún les queda mecha para regalarnos otra década para el recuerdo (héroes en la recámara e historias que contar, desde luego no les faltan).
Sea como fuere, si Marvel concluyera su andadura en la pantalla grande con esta tremenda película, habría cumplido con creces y engrosado una página indeleble de la historia del celuloide.
Porque el Cine mainstream, como puro entretenimiento; el Blockbuster en la mejor acepción de la palabra, también es Cine.
Mayúsculo, perdurable, y a valorar, en su género, como merece.
¡Gracias Stan! ¡Gracias Kevin!... ¡Gracias Marvel!.
Lo mejor: el mayúsculo espectáculo encierra una historia de personajes.
Lo peor: la incertidumbre de si en la Casa de las Ideas serán capaces de igualar esta década.
Comentarios
Publicar un comentario