Críticas de Cine: 'Sabotage': grupo salvaje... y descerebrado



Una compleja redada en el cuartel general de un peligroso cártel de la droga, en Atlanta, se convierte en un golpe perfecto cuando el superequipo especial de la DEA, comandado por el agente John Breacher, se hace con un botín de 10 millones de dólares a espaldas de sus superiores. Tras pasar seis meses bajo vigilancia de Asuntos Internos, ha llegado la hora de que se reúna la brigada para cobrar su parte del dinero. Sin embargo, alguien comienza a eliminar a los miembros del equipo, uno a uno.

Cuando David Ayer alumbró el inesperado éxito 'Sin tregua (End of Watch)', una película que tenía como centro la inquebrantable amistad de dos policías y sus aventuras/desventuras en la lucha contra el crimen, muchos pensamos que la visión cinematográfica del director, descarnada y realista, daría nuevos bríos al cine de género.

Antes de 'Corazones de acero (Fury)', con Brad Pitt, Ayer dirigió 'Sabotage', un nuevo intento del renacido Arnold Schwarzenegger en su (hasta ahora desafortunado) retorno a la gran pantalla.

La presencia del Austríaco no es, para nada, lo peor de la cinta. De hecho, se esfuerza intentando dotar de cierta entidad dramática a su personaje, atormentado por la masacre de su familia. El suyo es un tipo letal, de pocas palabras y rudo semblante, que se mueve en lo peor del sistema. El legendario azote de los cárteles de la droga, comandante de un equipo tan letal como inestable.

El mayor problema de 'Sabotage', es su inconsistencia. Con un guión mínimamente elaborado y personajes más allá del trazo grueso, la película funcionaría. Pero aquí todos y cada uno de los desdibujados miembros del comando solo consiguen despertar nuestra antipatía: una panda de renegados fascistas, machitos adictos a la violencia, el alcohol y demás sustancias. 
La mayor defensa de la DEA contra los malos es lo peor de lo peor.

En ningún momento reconocemos en el grupo a seres humanos que merezcan nuestra empatía. No son agradables; no luchan por algo mayor que ellos mismos; no merecen confianza alguna y, si pasaran a nuestro lado, cruzaríamos la calle espantados.

Tampoco nos dicen nada los que se suponen que son 'los buenos': el FBI es mostrado aquí como unos corruptos descerebrados con demasiada (y poco creíble) mala leche.

La profusión de tacos no ayuda, y a ratos hasta resulta gracioso que nadie sepa concatenar más de diez palabras seguidas sin soltar ocho improperios. ¡Que alguien regale un diccionario a estos muchachos!

Quizás 'Sabotage' sea la aproximación de Ayer y Arnold a estilos como el de 'The Wire'; o tal vez un intento de demostrar que el ex-Gobernador ha madurado y puede hacer más que autoparodiarse con sus colegas Mercenarios.

Con acción a trompicones, diálogos imposibles y odiosos personajes, al mítico Actioner le queda mucho camino por recorrer para volver a lo más alto.

Lo mejor: Arnold lo intenta.


Lo peor: el tratamiento de los personajes y la acción dejan mucho que desear.

Por: Eduardo Bonafonte Serrano. 

Comentarios

Entradas populares