Críticas de Cine: ‘Ahora me ves…’: ¡menudo truco!


Un equipo del FBI debe enfrentarse a un banda de criminales expertos en magia que se dedican a atracar bancos. Son “los cuatro jinetes”, un grupo formado por los mejores ilusionistas del mundo. Durante los atracos, dirigidos siempre contra hombres de negocios corruptos, hacen llover el dinero robado sobre los espectadores, ante la atónita mirada de un equipo de élite del FBI que les sigue la pista. 
A estas alturas podemos afirmar que Louis Leterrier sabe lo que hacer en una película de acción. El problema viene cuando, además, tiene que contar una historia y que ésta guarde un mínimo de coherencia.
A rebufo (y rizando el rizo) de otros títulos como ‘El truco final’, ‘El Ilusionista’ o ‘Ocean`s eleven’, Leterrier reúne un reparto de lujo en un cóctel que mezcla el mundo de la magia (de la mediática, la de Copperfield) con impolutos ladrones de guante blanco que sonrojan los carrillos de las fuerzas del orden, haciendo que parezcan idiotas.
Si el espectador entra en la Sala dispuesto a divertirse, no se verá defraudado, pues sus dos horas de montaña rusa no dejan un solo momento para el respiro, con un ritmo endiablado (sin convertir la cámara en una enferma de galopante Parkinson) que solo decae cuando se encienden las luces.
Si cometemos la imprudencia de ahondar en lo que estamos viendo, buscando el por qué de las cosas, nos daremos cuenta de que estos Magos están más cerca de heroicos ladrones/superhéroes/genios/milagreros/ninjas/modelos cuyos números son poco menos que imposibles, por mucho que la desviación de la atención sea la base de cualquier engaño.
Pero aquí lo importante es el viaje, y el elenco está tan inspirado como repleto de carisma (Morgan Freeman, Michael Caine, Woody Harrelson, Isla Fisher y Jesse Eisenberg necesitan muy poco para resultar creíbles. Incluso el sobrevalorado y soso Mark Ruffalo divierte, para variar) dispuestos a que, a ratos, incluso nos creamos lo increíble.
Más falsa que un duro de madera, ‘Ahora me ves…’ es un viaje solo de ida, sin pretensiones ni trascendentes búsquedas de tres pies al gato.
Avisados quedan. La ilusión divierte de lo lindo… siempre y cuando no vayan de público difícil.
Lo mejor: es muy divertida.
Lo peor: bajo el truco, no hay nada.
Por: Eduardo Bonafonte Serrano.

Comentarios

Entradas populares